En el frio polo norte vivía un pequeño huevo de pingüino abandonado , que con el paso del tiempo cayó al agua .
Allí un simpático calamar le dio calor hasta que nació . Le enseño a dar sus primeros pasos , a comer y a cazar , pero lo que el no sabia es que los pingüinos viven en tierra firme y que bajan al agua a refrescarse . De eso se entero cuando un pequeño y amable pingüino se lo contó .
El pingüino se enfado con el calamar , pero se reconciliaron porque el calamar le contó toda su historia y también porque decidió que fuera un pingüino marino , un pingüino diferente . El pingüino se quedo satisfecho con la contestación y pensó que ese era su hogar y aunque los pingüinos normales vivieran en la tierra firme , a el le gustaba el mar , y también le gustaba ser único .
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muy bonita la historia al fin y al cabo todos somos unicos e irrepetibles. menos mal que existe la pluralidad y con ella la tolerancia.
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